jueves, 2 de febrero de 2017

SINERGIAS

Le encargaron austeridad y su primera medida de ahorro fue desactivar la tecla para seleccionar más azúcar en la máquina de café. La fotocopiadora fue su segundo caballo de batalla y las copias en color se tornaron en artículo de lujo. El ascensor solo podría usarse para subir, la bajada debería ser imperativamente por las escaleras. Aprovechando sinergias el recepcionista se convirtió en mensajero y, durante sus necesarias visitas al baño, debía repartir el correo entre el resto de los empleados. El departamento de compras velaba también por el reciclaje y solo entregaba un bolígrafo nuevo a cambio del vacío. Se sustituyó el catering en las reuniones por un bizcocho casero que cada semana aportaba uno de los trabajadores. Señor Martínez: “esto no es economía es tacañería” le recriminó  el CEO de la empresa, eso sí,  después de verse obligado a compartir habitación con él en un viaje de negocios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario